Frank Walus

Finalmente se estableció en Chicago, donde trabajó en una fábrica de autos hasta su retiro en 1972.

Dos años después, Walus fue acusado por Simon Wiesenthal de haber colaborado con la Gestapo durante la guerra.

Consecuentemente fue despojado de su ciudadanía estadounidense y se ordenó su deportación.

Walus presentó evidencias para impugnar la declaración de Wiesenthal, la cual la corte consideró concluyente.

[4]​ Cualesquiera que sean los méritos del caso o la controversia, el juicio tuvo un impacto negativo en Walus, quien declaró haber sido atacado físicamente en numerosas ocasiones.