Con la camiseta del Slavia Praga, en el que estuvo trece temporadas, ganó ocho ligas nacionales y la Copa Mitropa de 1938.
[2] Ya consagrado en la titularidad, en enero de 1926 debutó con la selección nacional frente a Italia.
El encuentro fue tan violento que jugó la prórroga con fractura en el antebrazo, aunque no se percató hasta el pitido final.
[1] Dos días después se programó un desempate en el que causó baja y los checoslovacos fueron eliminados.
[5] Se le rindió un funeral oficial y Karel Poborský, capitán de la selección checa, retrasó su fichaje por el Manchester United para poder asistir.