[1] Frida Hartz mostó interés desde muy temprano por la fotografía y a los 12 años tuvo su primera cámara.
Comenzó con fotografía callejera y social, sobre todo de mujeres, mujeres indígenas y en movilizaciones sociales: Inició su carrera profesional en 1984, año en el que publicaron su primer trabajo fotográfico y en el que tuvo lugar la fundación del periódico La Jornada,[3] donde desarrolló su carrera como fotoperiodista durante diecisiete años.
No tardó mucho en dejar este periódico para continuar su carrera como fotógrafa independiente, colaborando en distintas publicaciones en Alemania y Nueva York.
[5] Entre sus primeras obras se encuentra Sepelio, tomada en 1986 y publicada en enero de 1987 en la contraportada del diario La Jornada.
Su ensayo fotográfico La pólvora Maya ha sido expuesto en más de 20 países y ha recibido diversos reconocimientos.