Aunque su infancia, estudios y juventud son desconocidas, para 1873 ya era un reconocido dirigente liberal en Ambalema.
Entres los demás candidatos también se listaban a destacados militares como Santos Acosta y Gabriel Vargas Santos, todos reconocidos líderes militares del país.
Ese año también se postula como candidato a la presidencia estatal de Tolima, enfrentándose al conservador Didacio R. Delgado, quien tras perder las elecciones invade a Tolima desde Cundinamarca para tomar el poder por la fuerza.
Santos es electo y se posesiona el 16 de diciembre de 1879 en Ambalema aduciendo que el orden público estaba turbado y por eso podría posesionarse en otra ciudad distinta a la capital estatal.
Pese a sostener disputas políticas con el gobierno de Rafael Núñez, mantuvo con este una relación cordial.