El G-14 fue creado en septiembre de 2000 por 14 clubes europeos para defender sus intereses comunes ante la UEFA y la FIFA.
Estos clubes exigen una compensación por cada jugador liberado, debido principalmente a la gran cantidad de seleccionados nacionales que poseen.
El principal propósito del G-14 era exigir una compensación económica por cada jugador cedido a su respectiva selección y por aquellos lesionados en dichos partidos.
Mientras Blatter velaba por una justa competitividad deportiva a nivel internacional (selecciones nacionales), otro (G-14) buscaba defender sus intereses financieros y deportivos, como el de sus inversiones, los jugadores, siendo éstos 'la manzana de la discordia entre ambos'.
El G-14 reclama "860 millones de euros a la FIFA por los daños sufridos por los 18 clubes del grupo en los últimos 10 años", declaró el abogado del grupo de clubes, Jean-Louis Dupont.