En el equipo riojano jugaría las siguientes tres temporadas, aumentando considerablemente su cantidad de minutos en cancha por partido.
Allí encontró muchas más oportunidades para jugar, por lo que sus promedios crecieron en todos los rubros.
Ese último equipo estuvo también integrado por jugadores como Emanuel Ginóbili, Fabricio Oberto, Juan Ignacio Sánchez, Leonardo Gutiérrez, Luis Scola, Leandro Palladino y Lucas Victoriano, siendo la semilla de lo que posteriormente sería la Generación Dorada.
Fue asistido por el médico Ernesto Bosco y llevado al hospital para ser reanimado, pero las intervenciones de los profesionales no tuvieron éxito.
En los días posteriores a su deceso se hizo público que Riofrío había sido diagnosticado con una miocardiopatía hipertrófica hacía unos pocos meses atrás, pero que ya registraba problemas de índole cardíaco desde su paso por Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia.