Gato elfo

Todavía no es reconocida como raza por la World Cat Federation (WCF) o la Asociación Internacional de Gatos (TICA).

[1]​ Su nombre se debe a que sus orejas largas, puntiagudas y dobladas, con una ligera curva cayente hacia atrás, son muy parecidas a las de los elfos.

Estos gatos, al no contar con pelaje, necesitan muchos más cuidados que los de cualquier otra raza, como que los bañen de manera regular.

A pesar de ello, estos gatos no suelen tener problemas de salud a no ser que se les exponga al sol o al frío durante mucho tiempo, ya que se les puede irritar la piel.

Por ello, muchos veterinarios recomiendan controlar la cantidad de alimento que se les proporciona para evitar la sobrealimentación y que esto les cause obesidad.