Girolamo da Sommaia (Florencia, 1573 - 1635) fue un escritor e historiador italiano.
Hace una descripción curiosa del ambiente cultural y de sus relaciones sociales: los Anaya, los Maldonados, el conde Monterrey… Pedro Gómez -el barbero-, sacerdotes, menestrales, las predicaciones, los entresijos de la vida universitaria, sus relaciones con prostitutas (Petrona, Belisa, Francisca di Salas… "per dolcitudine… 4 reali"), hasta detalles muy íntimos (In somniis emisi seminem).
El estudiante poseía una buena posición económica que le permitió alquilar una casa a la que invitaba a compañeros de estudios, amigos e influyentes miembros de la sociedad local, entre ellos eruditos y literatos a los que frecuentaba, como Ambrosio Alemán o Lorenzo Ramírez, con quien cambiaba voluntariamente libros e impresiones.
En 1604 el joven y prometedor jurista Juan Solórzano Pereira (que obtendrá en 1606 la prima cátedra de leyes) le hizo leer en primicias su tratado sobre el parricidio, Parlai a Solórzano del suo libro de Parricidijs.
Incluso anotaba los pecados de que se confesaba, no solo por sus excesos sensuales con ragazze compiacenti, sino de sus lecturas heterodoxas: «Confessai con fra Lamberto – scrive il 10 novembre 1606 – ventiuna fornicazione.