Fue descubierta en 1817 en Capo di Bove, en la región de Lacio (Italia), siendo nombrada así en honor de Carlo G. Gismondi, mineralogista italiano que previamente había descubierto el mineral "zeagonita", que hoy día no se considera propiamente una especie mineral, sino un tipo de gismondina, y que fue el primero en examinarla.
Como las demás zeolitas, lo que antes era la especie gismondina está actualmente dividida en función de cual sea el catión intercambiable dominante.
En el caso de la gismondina, solamente se conoce en la naturaleza hasta ahora la gismondina-Ca, que responde a la fórmula indicada anteriormente.
[2] La gismondina es una zeolita comparativamente poco frecuente, de la que se conocen unas 50 localidades en el mundo.
También aparece en fisuras de rocas calcosilicatadas, formada por acción hidrotermal.