Giulio Camillo Delminio

[1]​ Se interesaba por la retórica y tradujo Le ídee overo forme della oratíone atribuido a Hermógenes.

Estudió filosofía y jurisprudencia en la Universidad de Padua, fue profesor durante un tiempo en Bolonia pero se dedicó la mayor parte del tiempo a la escritura de obras de teatro, lo que no le satisfacía monetariamente, ya que Giulio se veía constantemente en necesidad de ayuda económica.

Giulio le muestra al rey su proyecto arquitectónico sobre el llamado Teatro de la memoria y recibe fondos para financiarlo, con la promesa de otorgarle más, aunque esto ya no se pudo cumplir debido a que El Rey de Francia no tuvo el apoyo que esperaba de los ducados y entonces Camillo retorna a Italia con la pérdida de su benefactor.

Pero en poco tiempo a oídos del Marqués del Vasto, Alfonso Dávalos, gobernador español de Milán llega la noticia de que Camillo aún busca financiamiento para completar su proyecto y se ofrece para concederle una pensión siempre y cuando lo hiciera partícipe en el proyecto.

Todo el proyecto está expuesto en el libro, donde se explica la estructura y el orden del edificio; tenía forma de anfiteatro, estaba seccionada en siete partes o filas y cada símbolo pretendía ocupar el sitio apropiado según su correspondencia planetaria.