El día 8 de marzo Brown, que se encontraba frente a Colonia con la Hércules, la Fortuna, el San Luis y la Carmen, divisó tres bergantines realistas en dirección noroeste.
Los siguió hasta el anochecer, momento en que habiendo verificado que entraban al canal de Martín García y se dirigían a la isla, torció rumbo a Buenos Aires en busca de refuerzos.
El plan de Brown consistía en atacar por frente y retaguardia a la línea española.
En esta, la primera y más sangrienta jornada del Combate de Martín García, Romarate consiguió rechazar exitosamente el asalto.
Tras la retirada de Romarate, Brown envió una pequeña división en su persecución al mando de Tomás Nother compuesta por la sumaca Santísima Trinidad, la goleta Fortuna, la balandra Carmen, los faluchos San Luis y San Martín y la cañonera Americana.