Existen unidades ambientales formadas por vegetación dunar relictica, alcornoques litorales, bosque cerrado de alcornoque, lagunas litorales, bosque medio de alcornoque y tomillares xerofíticos con brecina, que, sumadas a otras unidades ambientales homogéneas de menor valor pero que también son importantes para conservar.
Se observan taxones dispersos de distintas especies protegidas por la legislación vigente y que están catalogadas como amenazadas, vulnerables y en peligro de extinción.
Cuenta con numerosos endemismos tanto botánicos como faunísticos, principalmente anfibios, como el Tritón pigmeo y el Sapo de espuelas.
En definitiva el sector denominado “Guadalquitón” lo conforman un conjunto de unidades ambientales funcionales, interactivas y originales, que cumplen con la condición de un ecosistema altamente sensible, a cualquier alteración o transformación urbanística, turístico o deportivo, por mínimo que sea.
[5] Igualmente, el yacimiento romano de Guadalquitón que se localiza en su interior está muy deteriorado