Sin embargo, su primera intervención oposicionista a Victoriano Huerta fue como agente del general Félix Díaz en Cuba, cuando se dio el rompimiento entre los dos involucrados en el cuartelazo a Francisco I. Madero.
Al incorporarse a la lucha constitucionalista fue sometido a un consejo de guerra presidido por el general Francisco J. Múgica.
Fue absuelto y continuó al lado de Lucio Blanco, aunque luego operó por mayor tiempo a las órdenes de Pablo González Garza.
Ocupó varios puestos administrativos durante la presidencia de Venustiano Carranza.
Fue diputado federal por la XXX Legislatura del Congreso de la Unión.