Ejerció como Embajador de Colombia ante la Santa Sede durante dos periodos: entre 1998 y 2007 y en una segunda ocasión desde 2014 hasta su muerte en 2017.
En 1988 se convirtió en asesor permanente del Consejo Episcopal Latinoamericano y de la Conferencia Episcopal.
En 1997 se convirtió en el primer laico latinoamericano que se dirigió a los cardenales en el Sínodo de Obispos, invitado por Juan Pablo II.
Así mismo, fue consultor en el Pontificio Consejo de la Familia y el Pontificio Consejo para los Laicos.
Fue el impulsor de la visita del papa Juan Pablo II a Colombia en 1986 y de la Visita del papa Francisco a Colombia en 2014.