Guillermo Perry Rubio

Allí, cuando cursaba el último grado de bachillerato, aún no tenía definido que quería estudiar.

Luego de volver a Colombia, Alfonso López Michelsen, presidente recién electo, lo llamó a ser parte del equipo del Ministerio de Hacienda junto con Rodrigo Botero, Miguel Urrutia, Jorge Ramírez Ocampo, 'Pacho Ortega' y Roberto Junguito Bonnet.

En 1974 le pidieron preparar una reforma tributaria, la cual fue según expertos la más importante de la segunda mitad del siglo XX.

Allí, implementó una reforma tributaria que permitió adquirir los recursos para llevar a cabo el Plan de Salto Social.

En ese entonces decidió que no volvería al sector público ni a participar activamente en la política.

Los bancos volverían luego a vender esos predios con un nuevo sistema que se creó para superar al Upac: el UVR.

Esta situación lo mantuvo -así como al mismo presidente Samper-, bajo las críticas de gran parte de la sociedad, que lo vio como un favorecimiento al sector financiero y a sus gremios, con los cuales, como con el periódico El Tiempo -de propiedad del magnate financiero Luis Carlos Sarmiento Angulo- mantuvo siempre una relación muy cercana.

Sin embargo, Perry expresó que prefería un trabajo técnico, para lo cual fue nombrado Economista Jefe del Banco Mundial para América Latina y el Caribe.