Su niñez se trastocaría al ser después trasladado a Inglaterra con unos parientes puritanos de personalidad severa e intransigente, por lo que la convivencia con ellos marcaría negativamente y para siempre su carácter.
Sus últimas palabras, de acuerdo con distintas fuentes, fueron: «Put that damn cigarette out!» («¡Tira ese maldito cigarrillo!»).
H. H. Munro nunca contrajo matrimonio y, debido a la estricta moralidad de la época, mantuvo en secreto su homosexualidad.
[3] Saki es considerado un maestro del relato corto, a menudo comparado con O. Henry y con Dorothy Parker.
"El cuentista" es un relato que promueve la reflexión en torno a la función de literatura y la imaginación.
Quizá sea "La ventana abierta" ("The Open Window") su cuento más famoso; su última frase: «Las fabulaciones improvisadas eran su especialidad», se ha hecho célebre.