Estudió entre el colegio Salem, ubicado en el lago de Constanza, Lausana, Ginebra y Londres, donde posteriormente amplió sus estudios durante un año.
Ahí es donde conoció al arquitecto Jaime de Alvear, con quien se casó.
Tras fijar su residencia en Madrid, el matrimonio tuvo tres hijas: María, Ana y Patricia.
[8] Dicho edificio fue sufragado a partes iguales por el Gobierno de Extremadura y la propia Helga de Alvear quien cedió una vivienda adjunta para la ampliación y pagó al estudio Mansilla + Tuñón Arquitectos el proyecto arquitectónico de la nueva obra.
[9]También la Universidad de Extremadura donó un terreno para hacer posible la ampliación.