En 1788 comenzó a asistir a las Escuelas de la Royal Academy y obtuvo una medalla de plata en pintura histórica por su obra Caractacus Recognising the Dead Body of his Son.
En el extranjero, le pidió a la Royal Academy una beca luego de que su padre cayese en bancarrota.
Dos años más tarde, regresó a Gran Bretaña luego de pasar por Viena y Dresde.
En 1809 exhibió Christ Blessing Young Children, la cual más tarde ocuparía el altar de St.
En 1805, un hombre apellidado Hibbert lo contrató para que pintase un friso de Cupido, junto con varios otros artistas.
Pintó grandes transparencias, aparentemente para ser iluminadas por detrás, para el "Grand Revolving Temple of Concord" construido en Green Park para la visita de varios soberanos que celebrarían prematuramente la derrota de Napoleón Bonaparte.