Hermandad del Cristo de las Lágrimas (Córdoba)

En ésta, la talla procesionó por las calles del Parque Figueroa, haciéndolo por primera vez sobre un paso procesional, y siendo acompañado en todo momento por representantes otras Hermandades de la ciudad de Córdoba, fieles y devotos del barrio.

La talla es obra de Juan Jiménez y Pablo Porras, discípulos del imaginero Francisco Romero Zafra.

Cabe destacar que fue una tarde algo inestable en lo meteorológico, y que cuando el paso llegaba a la parroquia de Santa Rafaela María, comenzó a llover, debiendo refugiarse el paso bajo unos soportales laterales de la iglesia hasta que la lluvia remitió y permitió reanudar el camino de la corporación a su sede canónica.

Es una imagen moderna, que demás, presenta la peculiaridad de ser el único crucificado de Córdoba cuyos pies están clavados por dos clavos distintos, representando una iconografía única.

Su boca se encuentra entreabierta, posiblemente por las complicaciones que a los crucificados les suponía el respirar cuando estaban clavados en el madero.

Sin embargo, estos no procesionan debido a las estrechas dimensiones del actual paso de salida.

En la actualidad no procesiona en la salida de la Cofradía el Sábado de Pasión, realizando su salida tan sólo en el Rosario Vespertino organizado por la Hermandad el quinto domingo del tiempo litúrgico cuaresmal.