Un local denominado como Heuriger tiene unas limitaciones legales que le diferencian de las tabernas o restaurantes.
Por motivos económicos algunos Heurigen abren junto a estos locales restaurantes que pueden servir otras comidas, e incluso cerveza, por ejemplo.
Para hacer a los establecimientos más rentables, el mismo local es atendido por diferentes vinicultores (winzers) de forma secuencial.
Si hay música será tocada por Heurigensänger o cantantes de Heurigen (generalmente dos), que se acompañan con una guitarra y un acordeón respectivamente.
El edicto tuvo que renovarse en 1845 debido a imperfecciones detectadas y poca concienciación ciudadana.