Hildegarda de Baviera

[1]​ Aunque estaba interesada en el arte y la pintura, no podía participar en la lecciones por ser mujer, por lo que mantuvo correspondencia con el pintor Enrique von Zügel, enviándole sus dibujos por correo para que los corrigiera.

Hildegarda tenía una amistad muy profunda con la escritora Emilia Giehrl; después de su muerte, escribió un libro sobre ella.

Ese año, el criador de rosas Peter Lambert presentó una rosa híbrida amarilla cremosa y ligeramente perfumada que lleva su nombre.

El tema de esta conferencia fueron los problemas sociopolíticos que la guerra trajo consigo.

Hildegarda permaneció soltera toda su vida, y no tuvo hijos.