El territorio ocupado por los bolcheviques se convirtió en un estado títere del Partido Comunista, la República Socialista Soviética de Ucrania.
Muchos ucranianos consideraron inicialmente a los soldados de la Wehrmacht como liberadores del dominio soviético, mientras que otros formaron un movimiento partidista anti-alemán.
La victoria en la guerra contra Napoleón inspiró a transformar Rusia en una democracia progresista con un orden constitucional.
Para destruir la base naval de Sebastopol en 1854, se eligió Eupatoria como el lugar del desembarco conjunto.
El nuevo emperador Alejandro II se comprometió a reformar el país siguiendo el modelo occidental.
Los hermanos buscaron formar una confederación de repúblicas eslavas libres y abolir la servidumbre del Imperio ruso.
En esos años, se reservaron varias unidades territoriales nacionales para grupos étnicos no ucranianos.
Además de una república autónoma en el oeste para el pueblo moldavo de Ucrania, existían en ese periodo varios raiones nacionales, que incluían ocho rusos, siete alemanes, cuatro griegos, cuatro búlgaros, tres judíos y uno polaco.
Simultáneamente, los ucranianos étnicos recién alfabetizados emigraron a las ciudades, que rápidamente se ucranizaron en gran medida, tanto en población como en educación.
El gobierno bolchevique inicialmente vio a la iglesia nacional como una herramienta en su objetivo de reprimir a la Iglesia Ortodoxa Rusa, siempre vista con gran sospecha por parte del régimen, por ser la piedra angular del Imperio ruso prerrevolucionario y la fuerte oposición inicial que tuvo hacia el cambio de régimen.
El cambio en las políticas económicas soviéticas hacia la industrialización acelerada estuvo marcado por la introducción en 1928 del primer Plan Quinquenal de Iósif Stalin.
Sin embargo, la industrialización tuvo un alto costo para el campesinado, demográficamente la columna vertebral de la nación ucraniana.
[8] Como en otros lugares, es posible que nunca se conozca con precisión el número exacto de muertes por inanición en Ucrania.
Si bien algunos ucranianos apoyaron a Polonia, sus esperanzas de independencia o autonomía se desvanecieron rápidamente.
Por lo tanto, Galitzia y Volinia con su población mayoritariamente ucraniana volvieron a unirse con el resto de Ucrania.
Los batallones del ejército sur fue enviado a Ucrania, el número de tropas y equipamiento soviético estaba igualado respecto al ejército alemán, pero el factor sorpresa llevó a un rápido y feroz avance por parte de Alemania.
En septiembre, casi todo el frente sudoccidental soviético, 660 000 soldados, fue mandado a campos de concentración.
Algunos activistas ucranianos del movimiento nacional esperaban un impulso para establecer un estado independiente de Ucrania.
Sin embargo, después del período inicial de tolerancia limitada, las políticas alemanas pronto cambiaron abruptamente y el movimiento nacional ucraniano fue brutalmente aplastado.
Esto finalmente cambió el rumbo de la guerra y abrió el camino para la maquinaria militar soviética hacia Occidente.
[38] Inicialmente, Ucrania fue vista como una república con favorables condiciones económicas en comparación con las demás regiones de la Unión Soviética.
[39] Sin embargo, el país experimentó una desaceleración económica más profunda que las otras antiguas repúblicas soviéticas.
[44][45] En 1996, se aprobó una nueva constitución, la cual convirtió a Ucrania en una república semipresidencialista y estableció un sistema político estable.
Viktor Yanukovych, el Primer Ministro en ejercicio, apoyado tanto por Kuchma como por la Federación Rusa, quería lazos más estrechos con Rusia.
El principal candidato de la oposición, Viktor Yushchenko, pedía que Ucrania pusiera su atención en Occidente y se uniera a la UE.
Este último partido abandonó la "Coalición Naranja" que mantenía con Nuestra Ucrania y el Bloque Yulia Tymoshenko.
Tymoshenko se postuló para presidenta contra Yushchenko y Viktor Yanukóvich, creando una carrera a tres bandas.
[59] La condena es vista como "justicia aplicada selectivamente por motivación política" por parte de la Unión Europea y otras organizaciones internacionales.
El 20 de junio se declaró una tregua unilateral de una semana con un ultimátum simultáneo a los mercenarios prorrusos y militantes locales para que abandonaran el país, tras lo cual comenzó la liberación del Estado, que se vio frustrada por la ya abierta agresión armada rusa.
La mayoría pudo formar gobierno el 29 de agosto por sí sola, sin coaliciones, y aprobó a Oleksiy Honcharuk como primer ministro.