Historia del guerrero y la cautiva

[1]​ Historia del guerrero y la cautiva es un relato escrito en una primera persona que designa al propio Borges.

[2]​ Continua narrando que "alguna vez, entre maravillada y burlona, mi abuela comentó su destino de inglesa desterrada a ese fin del mundo”[2]​ Algunas personas le dijeron que no era la única y, meses después, le señalaron hacia una mujer india de pelo rubio y ojos grises.

Un soldado le dice a la abuela que aquella mujer quería hablar con ella y esta acepta.

Le hizo algunas preguntas y la mujer contestó con dificultad dado que hacía quince años que no practicaba su lengua materna, el inglés, y le era muy difícil recuperarlo.

Es sabido que Borges conoce la primera parte de la historia porque la extrae de tres textos distintos pero que están relacionados entre sí y, al mismo tiempo, representan tres épocas históricas distintas.

El destino de ambas también puede abreviarse ya que las dos son cautivas en una vida lejana a la suya, “arrebatadas y transformadas por este continente implacable”.

En este cuento Borges actúa como una figura análoga a la de Pablo el Diácono ya que escribe en un idioma estructurado[Nota 3]​[4]​ –el español– al que intenta añadir nuevas imágenes propias de la experiencia americana, mientras que Pablo también habló de experiencias vitales en su lengua, el latín tardío.