Horno de laboratorio

Está recubierto por múltiples capas de asbesto que impide que el calor llegue al exterior del instrumento y altere el experimento o dañe al operario.

Estas resistencias se encuentran empotradas en paneles moldeados de fibra sobre tabique refractario.

Cuenta con pequeños cilindros montados en la parte superior como escape para una ventilación sencilla.

Estos se encuentran recubiertos interiormente por tapones plásticos o de goma para evitar que escape calor de más o entre algún material extraño mientras permanecen abiertos.

Estos en la parte externa del horno se encuentran protegidos por una pequeña laminita de acero la cual se desliza manualmente para abrir las ventilas o cerrarlas.

Horno de laboratorio