Humberto Silva

Como pretendía recorrer varios países del continente africano, en su labor de ayuda a los niños con cáncer, resolvió vacunarse.

Y en agradecimiento al hecho de haber descubierto por acaso la dolencia y haber tenido con eso la oportunidad de tratarse y curarse, hizo el voto de trabajar gratuitamente hasta que se le acaben sus fuerzas, para ayudar a los que necesiten e intentar cambiar la forma en que el mundo trata la enfermedad.

La clínica llegó para proporcionar, a los portadores, una atención totalmente gratuita, incluyendo consultas médicas y exámenes.

Hoy la ABPH tiene clínicas gratuitas en San Pablo, Río de Janeiro, Porto Alegre, Fortaleza y Belo Horizonte.

Cada portador pasa a tener la oportunidad de tratarse, curarse y salvar su vida.

La mayor realización del Fondo fue la construcción de su clínica gratuita, llamada cariñosamente de “Casa Humberto”, que recibe y trata a niños con cáncer, proveyéndoles médicos oncólogos, hematólogos, odontólogos, psicólogos, nutricionistas y otros, tratándolos, incluso, con quimioterapia.

Hasta entonces había un rechazo a la contratación de brasileños, juzgándoseles como si no tuviesen la fuerza y la resistencia necesarias para enfrentar el duro campeonato inglés.

Humberto que en ese entonces tenía apenas 22 años, trabajó en la Liga Premier por seis meses, contratado por el Newcastle United.