Nada en su nombre permite deducir su lugar de origen.
[6] Ibn Sahl es conocido por haber escrito un tratado sobre óptica alrededor del año 984.
El texto de este tratado fue reconstruido por Roshdi Rashed a partir de dos manuscritos (reeditados en 1993): Damasco, al-Ẓāhirīya MS 4871, 3 fols., y Teherán, Molinoī MS 867, 51 fols.
El manuscrito de Teherán es mucho más amplio, pero se encuentra en mal estado, y el de Damasco contiene una sección enteramente perdida en el otro.
En las partes restantes del tratado trató los espejos parabólicos, los espejos elipsoidales, las lentes biconvexas y técnicas para dibujar arcos de hipérbola.