[1][2] El vínculo entre Alí Atar y el rey Boabdil no fue únicamente amistoso sino también familiar.
Boadbil la tomó como esposa en matrimonio y tal como narra la leyenda, Morayma fue a la única mujer que amó en su vida.
Sin embargo, el ejército cristiano logró sobrepasar al musulmán alcanzando el triunfo y apresando a Boabdil.
Presentado como Su Alteza Real el Príncipe Aliatar, actúa como mensajero o guía que acompaña o precede a los Reyes Magos,[3] y que visita las ciudades y pueblos días antes que éstos para recoger las peticiones de los niños.
[5] En Gijón desfila también el considerado hermano de Aliatar, el príncipe Abdeladid.