[1] El alcalde Don Fulgencio Pérez Almagro proporciona en 1951, licencia para iniciar la construcción de la iglesia[2] que fue concebida por Pedro Pérez García como una basílica romana, muy similar a la de San Pablo en las afueras de Roma.
El templo, fue elaborado sobre los planos del aparejador Baguena y está dedicado a la Asunción de la Virgen, por haber declarado el Papa Pío XII el Dogma de la Asunción de María a los Cielos en el año 1951.
La principal flanqueada por dos columnas, coronadas por un frontón partido, con el símbolo del ánfora con azucenas, emblema de la Catedral de Murcia y su cabildo.
Posee un techo recto y tres naves, separadas por columnas de mármol, con capiteles dorados.
A la entrada se encuentra la escultura del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, talla del escultor José Noguera de Espinardo.