[3] En el siglo XVII se construyó la capilla bautismal, mientras que el XVIII supuso una importante transformación del templo.
Se añadió un tramo más a los pies de la nave, labrándose nueva portada y la torre.
[1] El presbiterio presenta ahora a la vista un conjunto de pinturales murales del siglo XVI, tapadas desde 1602 por sucesivos retablos.
[4] También presentan pinturas murales, aunque muy deterioradas, los nervios de la cúpula central y los muros laterales.
[6] El ajuar litúrgico del templo cuenta con un rico juego de casullas decimonónicas.