Se trata de un edificio realizado en estilo románico en el siglo XIII que fue múltiples veces reformado en el siglo XVIII con elementos del estilo renacenstista.
Conserva el techo y púlpito originales, ambos de madera, el interior está decorado con un retablo plateresco con pinturas hispanoflamencas.
[3] El acceso a esta es por una puerta de medio punto, con pórtico de madera y teja.
Presenta torre de media altura con dos campanas en lo alto.
Destaca que pese a tener una gran fachada de mampostería y piedra en el interior es estrecha.