En cuanto al interior, cabe destacar sus decoraciones pictóricas de la segunda mitad del siglo XX.
Se conservan algunos vestigios del siglo XI, posiblemente la iglesia primitiva, identificados con la actual.
Las obras definitivas se realizaron el último tercio del siglo XVIII, concretamente en 1784.
Durante la Guerra civil española de 1936-1939 fue incendiada y se perdieron el conjunto de retablos barrocos que decoraban las capillas laterales y el altar mayor; en los años setenta del siglo XX se decoró el altar mayor con pinturas murales de los pintores vigatanos Camil Bofill y Benet Barniol.
[1][2] En un camarín se venera la Virgen de la Popa, patrona del pueblo, con unos goigs dedicados para la devoción popular.