Tirsch levantó de nuevo el edificio, ya que durante la revuelta el anterior fue destruido.
Le tocó atender a los últimos pericúes ya que, para ese entonces, la etnia estaba prácticamente extinta.
[1] Posteriormente fue enviado a la Misión de San José del Cabo Añuití.
Así se embargó al Viejo Mundo hasta llegar a su natal Bohemia.
En otra se aprecian dos mamíferos, que es un puma tratando de atrapar a un borrego cimarrón.