Como activista de Unión Patriótica, recorrió el país haciendo Pedagogía por la Paz y promoviendo luego el “Sí” al Plebiscito.
Antes, junto a otros profesores y estudiantes, había promovido la creación de la Universidad Popular del Cesar en 1976.
Presionada, tuvo que dejar Colombia, en 1988, por Lima, Perú, pero no logró permanecer allí.
Imelda Daza vivió durante 26 años en Jönköping, en donde trabajó como docente escolar y universitaria.
[6] Más allá del resultado, ella misma mencionó que la votación fue histórica por el hecho de que, en una región con fuerte predominancia del Paramilitarismo en Colombia, por primera vez en mucho tiempo una fuerza de izquierda se presentó electoralmente.
El punto tres del acuerdo, atinente a las “Garantías para el nuevo partido o movimiento político”, generó las condiciones para el nacimiento de la agrupación Voces de Paz y Reconciliación,[7] que, según lo pactado, debía tener asiento en el Congreso para acompañar la implementación del acuerdo.
Allí viví 26 larguísimos inviernos y créanme que cada día de esos 26 años soñé con el retorno”.