Las personas, al conformarse como seres sociales, sin la interrelación con la sociedad no pueden notar su unicidad con el universo ni suprimir su egoísmo.
En ese sentido, su interdependencia social les permite poner a prueba su fe.
Todos los países (estado-naciones) son dependientes en diferentes grados, en cada una de las siguientes áreas: comercio, tecnología, comunicaciones, migración, entre otras.
La interdependencia no es rígida, porque las organizaciones, los individuos y las naciones pueden cambiar su producción desde un conjunto de productos a otro.
También fue "aprobada" por varias organizaciones no gubernamentales y organismos especializados de las Naciones Unidas.