[1] Cuenta con una extensión territorial de aproximadamente 200,000 m² conservando un paisaje natural deteriorado.
Actualmente se le puede clasificar como una isla arqueológica ya que conserva un testimonio de lo ocurrido desde los tiempos precolombinos.
Originalmente, esta isla había sido utilizada como punto estratégico por el ejército colonial que había construido un emplazamiento defensivo a manera de fuerte, era un sitio fortificado para alojar tropas de defensa.
El sitio fue estratégicamente favorable y desfavorable, ya que los rebeldes usaron las fortificaciones y las mejoraron con el fin de defender la isla, por ejemplo, se encuentran murales, senderos, rampas y andadores que se fueron construyendo en diferentes períodos de ocupación, pero el más importante militar y estratégicamente hablando, es el sistema de defensa en las costas de la isla, ya que construyeron dos líneas de muralla subacuática, otras dos perimetrales en playa y una más superior que resguardaba los principales edificios del sitio, lo que hacía difícil arribar a la isla.
Sin embargo, la parte desfavorable del sitio fue que, para sostener el levantamiento, los insurgentes fueron auxiliados por los habitantes ribereños que de forma sigilosa lograban por las noches enviar herramientas, armas, municiones y víveres por algún tiempo.
Los listones representan los colores usados en las vestimentas que usan las mujeres del pueblo de Mezcala para sus bailes tradicionales.