Los cargos contra la pareja se relacionan con los disturbios de 2017–18 en Qatif, en la Provincia Oriental.
[2][18] Según Human Rights Watch los cargos incluyen participar en protestas, incitar a protestas, corear consignas contra el régimen intentando inflamar a la opinión pública, filmar protestas, publicar en las redes sociales, utilizar la foto de otra mujer en su página de Facebook, y proporcionar apoyo moral a los alborotadores.
Human Rights Watch describió los cargos como "no parecidos a crímenes reconocibles".
[1][19] Al-Ghomgham no tuvo acceso a un abogado durante los primeros 32 meses de su detención.
[1] Shia Rights Watch buscó apoyo internacional para detener la sentencia de muerte, argumentando que sentaría un precedente para ejecutar a otras mujeres saudíes que hacen campaña por los derechos de minorías religiosas.