En 1982 el Opus Dei es erigido por el papa Juan Pablo II como primera prelatura personal de la Iglesia católica.
Como prelatura personal, el Opus Dei está formado por presbíteros y diáconos del clero secular a cuyo frente se encuentra un prelado.
Así, en 1941 solicitó y obtuvo del obispo de Madrid que el Opus Dei fuese una Pía Unión.
La nueva Pía Unión era una asociación formada por laicos (el único sacerdote es su fundador), hombres y mujeres.
Los miembros de la pía unión, viviendo en medio del mundo, buscan su propia perfección cristiana, por el trabajo ordinario santificado.