En 1989, desafiaba a Cory Everson por el campeonato mundial en el escenario del Olympia.
[4] Tras ganar casi todos los concursos de culturismo a los que se presentó, Paisley era conocida por estar siempre extraordinariamente delgada, con una hermosa musculatura y en plena forma para cada concurso.
Tras el nacimiento, se convirtió en cristiana y en una ávida estudiosa de la Biblia, asistiendo a la Iglesia Bíblica de Scottsdale y componiendo libros sobre salud, fitness, medicina y su recién descubierta relación con Dios.
Empezó a tener problemas de salud en 2015 y estos se convirtieron en una enfermedad grave en 2016.
Paisley, que había sido la subcampeona, recibió así el título.