[2][3] El infante se quedó sordo a los cuatro años tras una intervención quirúrgica por una doble mastoiditis.
Tuvo que abandonar España tras la proclamación de la II República.
Alfonso XIII lo consideraba incapacitado, al ser sordo, para poder ocupar el trono en caso de que la monarquía se restaurase en España.
Sus partidarios lo conocieron como Enrique VI de Francia y Navarra.
El papel de Jaime fue interpretado por el actor Pedro Miguel Martínez.