Es más conocido por organizar el Manifeste de l'homme témoin y abogar por el retorno a la figuración en la pintura.
Se afilió al Partido Comunista en fecha desconocida y se unió a las Brigadas Internacionales en la guerra civil española, de donde regresó gravemente herido.
[3] Tras terminar la guerra dirigió la revista Regards (1946-1947), un órgano del Partido Comunista.
En 1964 publicó un nuevo manifiesto, titulado Les pieds dans le plat!
como prefacio a la parte del catálogo del Salon Comparaisons dedicada a Maurice Boitel y al grupo de artistas figurativos invitados por este pintor.