Jesús Muñecas Aguilar, natural de Zaragoza;[1] ingresó en la Guardia Civil en el año 1959.
Estuvo destinado en el País Vasco entre los años sesenta y finales de los setenta donde, según numerosos testimonios, fue responsable de torturas contra militantes antifranquistas.
Ya entonces «poseía una siniestra fama como torturador en Euskadi que todavía se acrecentaría más en los años siguientes».
La revista Zeruko Argia publicó las fotografías del resultado de las torturas: mostraban las nalgas y las piernas negras por los moratones causados por los golpes que recibió.
[3] La jueza argentina Maria Servini acusa a Jesús Muñecas de haber participado en las torturas infligidas a Andoni Arrizabalaga en 1968 en Zarauz.