En esta ciudad completó su formación con la obtención de la licenciatura en Derecho.
Durante sus años de estudiante universitario conoció al jesuita Antonio Vicent Dolz (1837-1912), padre del movimiento social cristiano y activo propagandista católico.
[2] Desde principios del siglo XX, Joaquín Ballester participa desde Gandía con el padre Carlos Ferris y otros propagandistas católicos, en proyectos vinculados al catolicismo social en las comarcas de La Safor (Valencia) y de La Marina Alta (Alicante).
[2] El arranque de Fontilles hay que situarlo durante un triduo[3] de sermones y cultos en honor del Sagrado Corazón, que se celebraba todos los años en el pueblo de Tormos, para cumplir una disposición testamentaria del mayorazgo José Joaquín Ballester Mut (1821-1887).
Con estar tan imposibilitado vivía tan a solas, que él mismo tenía que lavarse la ropa, guisar la comida y aguardar, para beber o consumir agua, a que un viejecito del pueblo llenara el cántaro que a la vez el mismo Bautista dejaba arrimado junto a la puerta de su propia casa.
La lepra había hecho estragos en su cuerpo y hacía años que no se relacionaba con nadie.
En enero de 1909, ingresaron los nueve primeros enfermos en un sanatorio que contaba entonces con once pabellones.
[9] Durante la Guerra Civil Española, Joaquín Ballester Lloret, por su relevancia dentro de la derecha católica valenciana y el peligro que ese hecho entrañaba para su integridad física, estuvo exiliado en Portugal.