Joaquim Tenreiro

Retornaron a Portugal en 1914, y trabajó con su padre como carpintero.

Sus esfuerzos iniciales, incluyendo en 1942 las sillas ligeras (Poltrona Leve) para la residencia de Francisco Inácio Peixoto, alcanzaron un éxito considerable, lo que le permitió en 1943 fundar su propia firma, Langenbach & Tenreiro.

Uno de sus principales clientes fue el arquitecto brasileño, Oscar Niemeyer, que le solicitó distintos encargos para sus casas.

Tenreiro desarrolló un estilo propio, aprovechando las calidades de la madera del país y técnicas locales de trabajo, tanto en madera como en caña.

De hecho, en 1931 participó en el llamado Núcleo Bernardelli, del modernismo brasileño.