Jorge López Sologaistoa

En 1999 asumió la vicepresidencia de OASIS, un año más tarde la presidencia y en 2003 la dirección ejecutiva.

Con el cambio de siglo Jorge adquirió gran notoriedad debido a su labor social, en especial por denunciar crímenes de odio y por dar sepultura digna a víctimas mortales; pero al mismo tiempo comenzó a recibir ataques, incluso ataques armados, y otras formas persecución.

En 2005, fue asesinada su asistente de comunicaciones, presumiéndose que el crimen habría sido una ejecución extrajudicial, perpetrada por policías.

Valientemente Jorge decidió entregarse a la justicia y luchar por demostrar su inocencia.

La fase de investigación duró casi un año, tiempo durante el cual Jorge se defendió sin desatender sus actividades humanitarias, pero bajo arresto domiciliario.

Durante los últimos años, Jorge ha realizado su trabajo, bastante afectado, por lo que él considera “una persecución para hacerlo claudicar”; pero incansablemente continúa denunciando la incapacidad del Estado para hacer valer los derechos y libertades garantizados en la Constitución de la República de Guatemala.

Inicia con fondos propios de sus fundadores que pretenden enfrentar la epidemia del VIH y sida, con forme el tiempo empiezan a recibir fondos para la implementación de diferentes programas para la prevención de infecciones transmisibles sexualmente y se enfocan en poblaciones vulnerables a la exclusión social, como lo son personas trabajadoras sexuales y poblaciones trans.

La separación de las organizaciones generan desde 2012 la división entre los grupos, cada una con sus propios intereses y se separan creando así, por primera vez dos desfiles marcados por la separación, en la que a ambos asisten similares cantidades de personas, pero se identifica que grupo es mantenido por su base comunitaria y cual posee el financiamiento en ese momento, aunque en el 2013 algunas organizaciones cambian de marcha y se unen organizaciones nuevas se repite la separación, aunque solo logran una pequeña cantidad de personas, mientras que en la principal se reúnen más de 10,000 personas que acompañan a OASIS y a otras organizaciones.

El 21 de febrero de 2006 Human Rights Watch externa su preocupación sobre reiterados actos de violencia e intimidación contra mujeres transgénero, lesbianas y hombres gay en Guatemala y publica una carta al presidente Óscar Berger en la que le insta a que adopte las medidas adecuadas para garantizar una investigación inmediata, exhaustiva e imparcial de estos crímenes y para llevar ante la justicia a las personas responsables.

Él u otro de los ejecutores disparó tres veces contra Sulma, dejándola gravemente herida.

OASIS le había informado a HRW que, en el 2005 en Guatemala, se produjeron al menos siete asesinatos de trabajadoras sexuales transgénero, incluidos los de Paulina y Mishel, y al menos seis asesinatos de hombres gay y mujeres transgénero que no eran trabajadores del sexo.

Los que llamaron propinaron insultos y amenazaron al personal de LESBIRADAS con ataques sexuales.

Jorge López Sologaistoa y Vinicio