Luego de esto sería reemplazado en su puesto por el General don José Miguel Alcérreca.
[10] Actualmente sus restos descansan en la bóveda familia Gutiérrez de la Vega (número 4143), ubicada al interior del Patio 53 del Cementerio General de Santiago.
José Antonio Gutiérrez y todos los miembros del Chacabuco, regimiento el cual fue creado por el Coronel Urriola, sentían por su Coronel especial cariño y confianza, lo que explica la disposición inicial de él y su tropa por seguir sus órdenes, pero a medida que avanzó la jornada se cambiarían de bando pasándose al regimiento que protegía el cuartel de artillería.
[2]“Al mando de su guardia anduvo con el batallón Valdivia i populacho amotinado, por la Cañada i calles contiguas hasta tomar parte en el ataque definitivo que hicieron al cuartel de artillería en el cual decía a sus soldados, según su propia confesión i deposición de un testigo: «a que manifestasen valor, que no se separasen de, él i que si lo veían acobardar o separarse de ellos le diesen un balazo».
Bien es verdad, que respondiendo al cargo que se les hizo en su confesión por estas palabras, dice que lo hizo para tener su guardia reunida i con ella poder pasarse al mencionado cuartel en la primera oportunidad que se le presentase”(Historia de la jornada del 20 de Abril de 1851 Una Batalla en las Calles de Santiago.
Benjamín Vicuña Mackenna)[11]Por su participación en la revolución sería sentenciado a ser pasado por las armas, pena la cual se conmutaría por la pérdida de su empleo y a cuatro años de presidio ya que fue indultado por pasarse al lado de la artillería.
Debido a la remoción del Coronel don Ricardo Castro de este cuerpo dada su mala actuación en la Batalla de Arica, donde don José Antonio Gutiérrez fue en realidad el verdadero Jefe del regimiento.