Ambas ordenaciones le fueron otorgadas por el Cardenal-Arzobispo de Guadalajara "Monseñor" Juan Sandoval Íñiguez.
Después de ser ordenado se trasladó a Roma (Italia) para continuar con sus estudios durante cinco años.
Como lema episcopal, escogió la frase: "Tú tienes palabras de vida eterna" (Jn 6, 68).
Su escudo está compuesto por un fondo azul con una estrella de seis picos que representa a la Santísima Virgen María.
El campo tiene un fondo rojo que hace referencia a la tierra jalisciense, bañada con la sangre de los mártires; y el castillo con tres torres, representa la unidad de las tres personas divinas.