José Méndez Asensio

Durante su pontificado, y a propia iniciativa, se celebró en Granada el III Sínodo Diocesano, clausurado en 1990, que trató de la renovación de la Diócesis.

Recibió al papa Juan Pablo II en la visita que este realizó a Granada el 5 de noviembre de 1982, pronunciado un discurso de profundo contenido social en la misa que se celebró en el barrio del Almanjáyar.

Entre 1988 y 1989 estuvo encargado de la diócesis de Almería como administrador apostólico, por enfermedad de su titular Manuel Casares.

El 8 de abril de 1988 fue nombrado obispo coadjutor de Granada Fernando Sebastián, en cuyas manos puso la administración de la diócesis hasta que fue nombrado arzobispo de Pamplona y Tudela en 1993.

Era popularmente conocido como «el padre Méndez» y se le recuerda como «un pastor bueno, un administrador fiel, amigo de los sacerdotes, acompañante espiritual y promotor decidido del apostolado de los laicos»[1]​