Terminada la revolución comunera se encargó de calmar los ánimos y combatió contra los indios.
Llegó a América en 1717, sirviendo como capitán de dragones en las tropas que luchaban en la región de la Banda Oriental (actual Uruguay), donde combatió contra los franceses a mando de Esteban Moreau.
En el cargo trató de apaciguar la provincia, luchar contra los indios del Chaco y enfrentar graves problemas económicos relacionados al restablecimiento de Santa Fe como puerto preciso (de parada obligatoria), en 1739.
Al año siguiente es reemplazado por Rafael de la Moneda.
[1] Su esposa fue Ana Francisca de Larrazábal y Avellaneda oriunda de Buenos Aires y con quien tuvo una hija, Dionisia.