Jose Silva (parapsicólogo)

Su padre murió cuando él tenía cuatro años de edad durante la Revolución Mexicana.

[1]​ Durante la Segunda Guerra Mundial estudió electrónica avanzada, convirtiéndose en instructor en el Servicio de Transmisiones del Ejército.

Silva enfocó sus ideas posteriores en estas ondas a las que atribuyó facilidades en facultades como el aprendizaje, imaginación, relajación, control del dolor, memorización, entre otras, las cuales se lograban con mayor facilidad durante la presencia de estas ondas en el cerebro, capacidades que de las que no hay evidencias fiables.

José Silva le escribió al doctor Rhine en 1953 para informarle sobre las experiencias con su hija en la práctica de la PES.

En estos años, su trabajo alcanzó gran popularidad, pero no la aprobación de la comunidad científica.

En 1965 escribió al presidente Lyndon Johnson ofreciendo sus investigaciones al gobierno de manera gratuita, pero los asesores científicos de Johnson rechazaron su oferta por sentir que no había utilidad para la PES.

Silva también experimentó con la hipnosis, pero aunque la hipnosis permitía a la mente ser más receptiva, él pensó que era mejor que la persona pudiera controlar por sí misma el proceso, a fin de mejorar a voluntad y de forma selectiva, el rendimiento de diversas actividades mentales como la memoria, aprendizaje, creatividad, imaginación, etc.

En 1956 comenzó a elaborar un programa de entrenamiento cuyos principios se usan aún hoy día en sus cursos.