Este se dedicó a la apicultura y fue el fundador de SANA (Servicio Apícola Nacional Administrativo) a finales de los años 40, empresa que quebró pocos años después.
En 1975 consiguió defenderla en la Universidad Complutense de Madrid y a este respecto, recuerda Consiguió, por suerte, publicar dos libros dedicados al cómic femenino y a la historieta humorística en la Editorial Cuadernos para el Diálogo.
Trabajó, asimismo, como asesor editorial para proyectos destinados a un público juvenil como, por ejemplo, la colección Alianza Forma y la Biblioteca Básica de Arte Anaya, publicaciones de carácter didáctico en las que se incluye por primera vez materias como el cómic, la fotografía o el cine.
[4][5][6] Ya desde sus inicios, su trabajo se vio recompensado con diferentes premios y reconocimientos.
En 2004 le concedieron el Premio Pablo Ruiz Picasso en la tercera edición del premio bienal Pablo Ruiz Picasso que otorga La Consejería de Cultura como reconocimiento a toda su carrera.
En ella se mostraban documentos de su actividad cultural en Málaga, obras ajenas y propias como El Templicón o aquellas realizadas con latas de conservas que él llamaba latoflexia y latotomía.